Las precipitaciones dejan en su templo al Señor de Chiclana y la Virgen de los Dolores
La Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Santísima de los Dolores y San Juan Evangelista no pudo procesionar en la noche de ayer jueves debido a las continuas precipitaciones. Así, la lluvia no dejó que una de las corporaciones más populares de Chiclana pudiera lucirse por las calles de la ciudad tras un año de espera.
Aunque la mañana de ayer se presentó soleada, las previsiones del tiempo para la noche no acompañaban con las expectativas para la salida procesional del Señor de Chiclana y María Santísima de los Dolores. Conforme avanzaba la tarde, el fervor entre los fieles y de los hermanos nazarenos iba decayendo pero siempre con la firme esperanza de que el cielo se despejara de nubes y facilitara que el Nazareno se reencontrara con sus incondicionales devotos. Pero las precipitaciones no cesaban e incluso fueron a más intensas por la noche. Mientras, dentro del Convento de las Madres Agustinas Recoletas, se podía observar las caras de decepción de los cofrades y el público que esperaba volver a ver al Nazareno.
Sobre las nueve de la noche, se reunió la junta de gobierno de la Hermandad del Nazareno para decidir si salía o no en procesión el Señor de Chiclana. Poco más tarde, se confirmaron los peores augurios cuando se comunicó a los presentes la imposibilidad de la salida procesional ante las persistentes lluvias y las pésimas previsiones climatológicas en horas siguientes.
Cabe recordar que el año pasado, las imágenes de Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores logró salir a la calle pese a las dudas de la presencia de lluvias que, finalmente, apareció a mitad del recorrido y obligó a variar el itinerario. Sin embargo, la noche de ayer jueves ofrecía un escasísimo margen a los responsables de la hermandad para que el Cristo y la Virgen pudieran pisar la calle para reencontrarse con sus feligreses.
redaccion: diario de cadiz
